Historia del moldeo por inyección de metal

El moldeo por inyección de metal (MIM) es un proceso desarrollado muy recientemente, en comparación con técnicas de forja o fundición.

Los primeros estudios sobre PIM (moldeo por inyección de polvo) se remontan a la década de 1920. Esta idea se desarrolló inicialmente para componentes cerámicos, especialmente para CIM (moldeo por inyección de cerámica). Posteriormente, durante la Segunda Guerra Mundial, los resultados de estos estudios se aplicaron a polvos metálicos (Fe-Ni) y se fabricaron las primeras piezas moldeadas por inyección de metal.

A partir de los años 1950, también en Rusia se desarrolló un proceso similar, pero únicamente con polvos cerámicos. Desde 1970, el moldeo por inyección de metales (MIM, por sus siglas en inglés) encontró cada vez más aplicaciones en Estados Unidos en aquellos sectores donde se requieren componentes de formas complejas y con altas propiedades. MIM se convirtió en un proceso industrial y el proceso se extendió rápidamente en Japón, y finalmente también en Europa, Rusia y China.

La industria MIM muestra un crecimiento explosivo en los últimos 8 años (2011 a 2018), incluyendo aplicaciones de mercado, productos, equipos MIM, fabricantes de piezas MIM, así como la planta de procesamiento de piezas MIM, lo cual impulsa una gran vitalidad en la industria.

Se proyecta que el mercado del moldeo por inyección de metales alcance los USD 3.77 mil millones para 2022. El crecimiento de este mercado se puede atribuir a la creciente demanda de piezas pequeñas y complejas fabricadas mediante moldeo por inyección de metales proveniente de industrias de uso final, tales como electricidad y electrónica, automotriz, médica y ortodóncica, industrial, productos de consumo, y armas de fuego y defensa.

Los lanzamientos de nuevos productos y las expansiones fueron las principales estrategias de desarrollo adoptadas por los actores clave que operan en el mercado de moldeo por inyección de metales. Empresas como Indo-MIM (India), Dynacast International (EE.UU.), ARC Group Worldwide (EE.UU.), Smith Metal Products (EE.UU.) y NetShape Technologies (EE.UU.) adoptaron estas estrategias para mejorar sus ofertas de productos y su base de clientes, así como para obtener una ventaja competitiva frente a sus competidores en el mercado. Estas empresas también se centran en invertir en actividades de investigación y desarrollo para introducir nuevos materiales económicos que satisfagan las cambiantes necesidades de los consumidores.